Los 4 puntos fundamentales para una efectiva estrategia de prensa

Al momento de plantear una estrategia de prensa, ¿cómo saber si estás siendo realista o estás pecando de demasiado ambicioso?; ¿cómo trazar la línea adecuada para no abrigar pretensiones desmedidas y, a la vez, tampoco dejarte llevar por la timidez?; ¿con qué recursos contás para llevar adelante la tarea? A medida que avanza el plan, las preguntas se multiplican. Y a responderlas de manera eficiente y clara es a lo que se dedica esta consultora. Porque tener las respuestas correctas requiere sí o sí de haber formulado con anterioridad las preguntas adecuadas.

La experiencia de años y la continua evaluación de las campañas emprendidas nos permiten saber cuál es el alcance ideal para tu estrategia, ponderar cada medio en términos tanto cuantitativos como cualitativos y definir el vínculo que se quiere construir con cada uno. Estos amplios tópicos a partir de los cuales se va erigiendo la estrategia luego comienzan a subdividirse en cuestiones más finas, que requieren indefectiblemente de experiencia en el rubro. Por caso: si los periodistas buscan información de impacto, la tarea consiste en brindarles información relevante y de calidad, con estadísticas y cifras inéditas, siempre respetando la veracidad de los hechos y los datos.

 

Nueva llamada a la acción

 

Y así van surgiendo distintas inquietudes de parte de las instituciones que necesitan de una aproximación “quirúrgica” a la prensa, esto es, individual y ajustada a cada caso específico. A partir de allí, podemos ya hablar de las etapas fundamentales en el planteamiento de una estrategia de prensa, trabajo en el que te acompañaremos en cada paso:

1) Definir tus objetivos: Esto es lo básico. ¿Qué estás buscando? ¿Qué querés lograr? Es decir, antes de ver en qué medios querés ver publicada tu información, debés dejar en claro cuál es tu meta. Tener el objetivo definido permite especificar las tareas que te ayudarán a conseguirlo. Asimismo, es imposible medir el éxito de una estrategia si las metas no han sido previamente establecidas de manera precisa. Por ejemplo, si tu empresa se dedica al turismo, tu objetivo puede ser optimizar tu presencia mediática o publicitaria entre el público de perfil medio-alto al que van dirigidos tus productos. A la vez, otra posibilidad sería destacar el valor añadido de tus servicios respecto de la competencia. En la medida en que indagues más y más en lo que realmente estás buscando, tarea en la que nuestra experiencia te resultará fundamental, podrás eventualmente acotar y definir el objetivo.

2) Confeccionar un plan de acción con los medios: Con metas ya claras, es hora de planificar. Una opción, entre muchas otras, es confeccionar un calendario mensual en el cual volcar el contenido de importancia que podrás difundir para tu público objetivo. En este paso, veremos en conjunto todas las actividades que tu institución realiza cotidianamente, y que son de relevancia social, y aquellos eventos que se dan de tanto en tanto pero que producen información valiosa no sólo para tu público meta sino también para la comunidad en general. Asimismo, la experiencia nos dice que, más allá de todo lo que planeemos con antelación, siempre surgirán situaciones inesperadas en las que, de pronto, tu organización podrá aportar datos de sumo interés. Para ello deberás estar preparado, de modo que puedas brindar un aporte o una respuesta lo más pronto y eficientemente posible.

3) Llevar a cabo el plan: Es el momento de conseguir resultados. Entonces, ponemos el plan en acción. Nuestra hoja de ruta será de fundamental ayuda para que la comunicación prevista se desarrolle sin sobresaltos y de la manera más clara. Desde ya, no está de más recordarlo, siempre será conveniente también ser flexibles para poder aprovechar las oportunidades que surjan, utilizando nuestra creatividad y la relación construida con los hombres y mujeres de prensa. Mientras todo transcurra por los carriles previstos, tu mensaje llegará a los destinatarios previstos de la manera más lúcida, interesante, contundente y oportuna.

4) Evaluar los resultados para mejorar en el futuro: En este paso hay que recordar los objetivos planteados en la etapa inicial y contrastarlos con lo efectivamente conseguido. Entre otros parámetros, podés fijarte si los medios de prensa respondieron a tu mensaje de la manera que vos esperabas, si las menciones que se han hecho de tu organización han tenido una extensión óptima, si tu información ha generado respuesta o impacto en los ámbitos de tu interés. Más allá del resultado de tu estrategia, hay que tener en cuenta que todo es perfectible y que hasta las más fructíferas campañas de comunicación requieren de mejoras constantes para evitar que caigan en la obsolescencia y el estancamiento.

Seguramente tu tiempo es acotado y no podés darle a la comunicación, tanto interna como externa, la atención que sabés que requiere. Para eso estamos nosotros. Ahora que sabés qué se necesita para encarar una estrategia de prensa, te invitamos a recorrer juntos este fascinante camino.

 

Nueva llamada a la acción

2019-07-24T14:48:19-03:00